26 Oct 2021
Investigación española revela la existencia de células madre en el cerebro que permiten la generación de neuronas toda la vida
La investigadora Llorens-Martin y su equipo han cerrado con su descubrimiento una discusión de décadas sobre la neurogénesis en los adultos y ha abierto una enorme puerta al estudio de posibilidades terapéuticas para favorecer el mantenimiento de esta capacidad durante todo el ciclo vital
Una investigación española apunta que las enfermedades neurodegenerativas limitan la capacidad de desarrollo y maduración neuronal y demuestra la existencia de células madre en el cerebro que permiten la generación de neuronas durante toda la vida.
La revista Science ha publicado los descubrimientos del equipo de la bióloga María Llorens-Martín en el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CSIC-UAM). Estos investigadores habían abierto un campo en el estudio del cerebro cuando, hace año y medio, descubrieron neuronas inmaduras en el hipocampo de adultos. Llorens-Martín cuenta que ese hallazgo “sugeriría la existencia de un proceso de neurogénesis, que esas neuronas nacían durante la vida adulta”. El trabajo continuó para descartar que esas células fundamentales para recibir, procesar y transmitir información se hubieran generado al nacer y quedado en estado de inmadurez, como defendían muchos científicos.
Ahora, la investigadora y sus compañeros han demostrado de forma definitiva, tras el estudio de 48 cerebros adultos, 15 de ellos cognitivamente sanos, la existencia de células madre e hijas, que se dividen muy rápidamente (proliferativas), maduran y generan nuevas neuronas. Y las deficiencias en este proceso no son la causa de enfermedades neurodegenerativas, sino al revés: son estas dolencias las que limitan la capacidad de seguir creando neuronas.
Llorens-Martin ha cerrado con su descubrimiento una discusión de décadas sobre la neurogénesis en los adultos y ha abierto una enorme puerta al estudio de posibilidades terapéuticas para favorecer el mantenimiento de esta capacidad durante todo el ciclo vital. “Hemos podido reconstruir, por decirlo así, toda la vida de estas nuevas neuronas, desde sus células madre, que las generaron, hasta que se convierten en neuronas maduras. Eso, hasta ahora, no se sabía. Se conocía su presencia, pero no de dónde procedían”, explica la investigadora.
La presencia de procesos patológicos que se dan en las enfermedades neurodegenerativas dañan el nicho neurogénico, que se convierte en un entorno hostil para la generación de nuevas neuronas; pierde esa capacidad que en principio debería permanecer de por vida.
El hipocampo presenta una notable vulnerabilidad a patologías neurodegenerativas. “Cada una de estas enfermedades genera una firma celular propia y daña de manera más acusada a determinadas subpoblaciones celulares que forman parte del proceso de neurogénesis hipocampal adulta. De esta manera, algunas poblaciones celulares son más vulnerables a determinadas enfermedades que a otras”, explican estos científicos.
Llorens-Martín considera que las deficiencias en la neurogénesis adulta “pueden estar relacionadas con los síntomas cognitivos, con la alteración del estado de ánimo o los procesos depresivos que muchas veces ocurren estos pacientes”. “La presencia de estos procesos patológicos que se dan en las enfermedades neurodegenerativas”, explica, “dañan el entorno, lo que llamamos el nicho neurogénico, que es otra de las cosas que hemos descubierto. Ese nicho se convierte en un entorno hostil, por decirlo así, para la generación de nuevas neuronas, pierde esa capacidad que en principio debería permanecer de por vida”.
“Vemos neurogénesis en los pacientes con todas estas enfermedades y en todas las etapas. Sin embargo, vemos alteraciones en el número, menos proliferación, lo cual nos habla de que estas células están más inactivas. Y una característica común a todas las enfermedades son las alteraciones en la maduración de las nuevas neuronas, es decir, que aunque haya más, no maduran correctamente, tienen una forma que llamamos aberrante y lo más probable es que mueran por el camino, pero la microglía, como sistema inmune del cerebro, no es capaz de eliminarlas”, señala la investigadora.
La demostración de la neurogénesis adulta, la localización de su origen y los efectos de las enfermedades sobre este proceso revelan nuevas opciones terapéuticas de gran importancia. Llorens-Martín afirma que este estudio “permite abrir una puerta a la posibilidad de recuperar la neurogénesis y atenuar algunos de los efectos colaterales de las enfermedades que están directa o quizás indirectamente relacionadas con el hipocampo, es decir, todas aquellas funciones en las cuales participan estas nuevas neuronas que no sean motoras”.
“Recuperando esta neurogénesis podríamos o bien prevenir la aparición de estos déficits o quizás ralentizar su progresivo avance. Y también existe un campo terapéutico para favorecer la neurogénesis. Hay algunos estudios en marcha sobre los efectos de determinadas estrategias, principalmente no farmacológicas, en ratones. Nuestro grupo se lleva bastantes años intentando revertir las alteraciones cognitivas y celulares que se producen en modelos animales mediante, por ejemplo, ejercicio físico o lo que denominamos enriquecimiento ambiental, que es una combinación un poco más compleja y que engloba, además de ejercicio físico, estimulación cognitiva y una mayor interacción social. Hay un consenso generalizado de que, cuando empiezan a aplicarse antes de la aparición de la enfermedad, sí que son efectivas”.
Jesús Ávila, investigador del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, cataloga el descubrimiento un “hito” que cierra una gran controversia sobre la neurogénesis en adultos: “Este proceso disminuye, pero existe en las personas mayores, aunque se ve afectado por enfermedades degenerativas”.
-Fuente consultada: El País